191. Cómo elegir el mejor SSD M2

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Un SSD M2 es un tipo de SSD que tiene un formato muy pequeño y delgado, similar a una barra de chicle. Su nombre viene de que se conecta a una ranura llamada M.2, que está integrada en la placa base del PC.

Los SSD M2 tienen varias ventajas sobre los SSD SATA, que son los más comunes y tienen un formato similar a los HDD. Estas son algunas de ellas:

Son más rápidos, ya que pueden aprovechar el protocolo NVMe (Non-Volatile Memory Express), que permite una comunicación más directa y eficiente entre el SSD y el procesador. Los SSD SATA, en cambio, usan el protocolo AHCI (Advanced Host Controller Interface), que está pensado para los HDD y limita la velocidad de transferencia de datos.

Son más fáciles de instalar, ya que no necesitan cables ni tornillos, solo se insertan en la ranura M.2 y se fijan con un pequeño tornillo. Los SSD SATA, en cambio, requieren un cable de datos y otro de alimentación, además de un espacio en la caja del PC.

Son más versátiles, ya que pueden tener diferentes tamaños y formas, según el tipo de ranura M.2 que tengan. Los SSD SATA, en cambio, tienen un tamaño y forma estándar, que puede no caber en algunos PC, sobre todo en los portátiles.

Por estas razones, los SSD M2 son la mejor opción para mejorar la velocidad y el rendimiento de tu PC al máximo. Sin embargo, no todos los SSD M2 son iguales. Existen diferentes tipos de SSD M2, según el tipo de ranura M.2 que tengan. Y entre ellos, los más rápidos y avanzados son los SSD M2 PCIe.